Por qué se debilitan las democracias en América Latina
El 30 de noviembre, la política española Elena Valenciano y el periodista venezolano Miguel Henrique Otero reflexionaron sobre «Democracia y autoritarismo» en la región en una sesión del ciclo Derechos humanos y convivencia cívica.
Participantes:
Elena Valenciano. Política, defensora de los derechos humanos y feminista, es experta en Política Exterior y Relaciones Internacionales. Fue diputada del Parlamento europeo, primero entre 1999 y 2008; y desde 2014 como cabeza de lista del Partido Socialista. Actualmente es vicepresidenta del Grupo de los Socialistas y Demócratas, responsable de Política Exterior -en particular América Latina, África, Magreb y Oriente Medio-, Cooperación al Desarrollo, Comercio Internacional y Derechos Humanos.
Miguel Henrique Otero. Periodista venezolano, presidente y director del diario El Nacional, que dirige desde el exilio. Fue presidente del Bloque de Prensa, la asociación de prensa principal de Venezuela. También fue presidente del Grupo de Diarios América, miembro de la directiva de la Sociedad Interamericana de Prensa y de la Asociación Mundial de Periódicos y Editores de Noticias.
José María Beneyto, catedrático de Derecho Internacional Público, Derecho Comunitario Europeo y Relaciones Internacionales de la Universidad San Pablo CEU, y profesor de UNIR.
La política española Elena Valenciano y el periodista venezolano Miguel Henrique Botero reflexionaron en torno a las causas y las consecuencias de la erosión de los sistemas políticos en América Latina y sus derivas hacia regímenes autoritarios, en un debate celebrado en la Universidad Internacional de la Rioja (UNIR), dentro del seminario Derechos humanos y convivencia cívica.
Se trataba de la séptima sesión del ciclo, que dirige y modera José María Beneyto, catedrático de Derecho Internacional Público, Derecho Comunitario Europeo y Relaciones Internacionales de la Universidad San Pablo CEU, y profesor de UNIR.
Elena Valenciano señaló que «las democracias y los autoritarismos conviven de manera intermitente en América Latina desde el siglo XIX» y que «el deterioro de la confianza alimenta la aparición de personajes antipolíticos; y de caudillos que tienden a perpetuarse en el poder». Tras la esperanza de la ola democrática que recorría el mundo al final del siglo XX, América Latina ha vuelto a caer posteriormente en autoritarismos, populismos, e inestabilidad, acrecentandose la brecha entre ciudadanía y gobernantes. Según la última encuesta del Latinobarómetro, (2023) sólo el 48 por ciento apoya a la democracia en la región, 15 puntos menos que en 2010. Existe, apostilló, «una fatiga democrática en América Latina»
Entre las causas del debilitamiento de las democracias, Valenciano destacó «la fragilidad de las instituciones, la mala calidad de los servicios públicos, la desafección a los partidos políticos y la corrupción». Debido a la pobreza y a las desigualdades, determinados sectores ven «la criminalidad, como el único mecanismo de ascensión económica y social».
Sostuvo que, a la hora de buscar soluciones, hace falta «una revitalización de la democracia, mediante gobiernos eficaces para combatir contra la pobreza, la desigualdad y la corrupción»; lo cual requiere, entre otras medidas, «un sistema fiscal que logre una redistribución justa, ya que el crecimiento por sí solo no sirve para afianzar la lucha contra las desigualdades».
Luz al final del túnel en Venezuela
Miguel Henrique Otero, por su parte, se centró en la compleja encrucijada de su país. Vislumbró «una luz al final del túnel» en Venezuela con las elecciones de 2024, una vez que el Gobierno ha levantado el veto para que la líder disidente, María Corina Machado, pueda participar en los comicios. Estados Unidos -explicó- supedita su ayuda a Maduro para superar «la monumental crisis económica» a que «el dictador dé pequeños pasos hacia la democracia». Una primera señal ha sido «el respeto a las primarias de la oposición, que se han celebrado sin incidentes y en las que Machado obtuvo más del 92% de los votos». Y ahora la habilitación para que pueda presentarse a las elecciones.
Aún así, el panorama es incierto, porque «EE.UU, le ha puesto muchos deberes a Maduro», y habrá que ver si cumple, y porque el trabajo de Machado es «una ruta minada»; su mayor reto, si gana, sería «reconstruir el Estado de derecho en Venezuela, donde toda la estructura de los jueces es corrupta».
En su intervención, el periodista indicó que «América Latina se enfrenta ahora a populismos de derechas y de izquierdas». Y que el gran peligro de éstos últimos es que pueden implantarse por vías democráticas, como ocurrió con «Chávez, que llegó a través de las urnas, y con un mensaje de regeneración, declarándose admirador de Tony Blair y la tercera vía. Pero después desmanteló los pilares de la democracia al tomar el Tribunal Supremo».